Un diente puede cambiar el color después de un tratamiento de conductos radiculares. En ese caso se blanquea el diente por adentro.
Para poder blanquear el diente por adentro es necesario abrirlo y quitar la parte superior del empaste de relleno de conductos radiculares. Se inserta el agente blanqueador y se sella el diente de manera provisional. Se cambia el agente blanqueador cada pocos días hasta el momento de obtener el grado de blanqueamiento deseado.